domingo, 13 de enero de 2013

Bueno consejos

En este tiempo sin pausas que vivimos, recibir un buen consejo de un buen amigo siempre se agradece, y si éste es además un gran tuno, se valora aún más. 

Hoy he recibido un buen consejo

Al finalizar el primer ensayo de este año de la Orquesta de Pulso y Púa, la verdad, no todo eran risas y jolgorio como estábamos acostumbrados. Se respiraba un cierto aroma a tristeza que nunca había habido en ese grupo de aguerridos hombres y consagrados tunos, alguno de ellos con más de ochenta años de vivencias a sus espaldas. Ésta desconcertante situación provocó que mi espíritu periodístico y preguntón me hiciera recorrer los corrillos que se iban formando espontáneamente para pulsar en primera persona el origen de aquella inquietante sensación.

Como dijo Groucho Marx, "al final las cosas no son como nos imaginábamos sino como nos temíamos".

Se trataba de nuevas noticias sobre la situación laboral de algunos miembros de la orquesta. Informaciones a priori preocupantes, pero, de nuevo, la sabiduría de los mayores nos abre los ojos y nos da una bocanada de aire cuando más lo necesitamos.

Nada más lejos que palabras de consuelo, todo lo contrario. Eran palabras de ánimo, aliento, esperanza y justicia: yo le conozco, y es un buen trabajador y mejor persona... no va a tener problema en encontrar trabajo, ya lo verás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja aquí tu comentario: